Al cierre del gobierno de Rutilio Escandón Cadenas, el estado de Chiapas enfrenta una de las peores crisis de su historia reciente, marcada por la violencia, la corrupción y el abandono gubernamental. Así lo denunció Willy Ochoa Gallegos, quien señaló que el sexenio que concluye será recordado por la devastación social y la inseguridad que se apoderaron de la entidad.
“Chiapas ha sido escenario de una sangrienta narcoguerra, de desplazamientos forzados masivos, de feminicidios y de un abandono absoluto por parte de las autoridades. Este gobierno fracasó en garantizar la paz, y por ello será recordado como uno de los más corruptos en la historia del estado”, afirmó Ochoa.
Willy Ochoa respaldó sus declaraciones con cifras contundentes que evidencian el deterioro del estado:
• Más de 8,300 muertes violentas registradas.
• 194 feminicidios, con focos rojos en municipios como Tapachula, Tuxtla Gutiérrez y Comitán.
• Miles de desplazados por la violencia.
• Más de 101,000 carpetas de investigación abiertas.
• Al menos 40 policías asesinados, según datos del Proyecto Azul Cobalto.
“La violencia se convirtió en parte del día a día para miles de familias chiapanecas; narcobloqueos, ejecuciones y masacres son ahora el rostro cotidiano de un estado que vive con miedo y desconfianza”, señaló Ochoa.
En materia de violencia contra las mujeres, Ochoa destacó que Chiapas alcanzó cifras alarmantes durante este gobierno. “La falta sensibilidad y empatía se reflejaron en políticas ineficientes para garantizar la seguridad de las mujeres, lo que refleja doblemente el abandono y la indiferencia hacia este sector tan vulnerable”, puntualizó.
El también exdiputado federal acusó a la administración saliente de desviar recursos públicos destinados al desarrollo del estado. “Mientras las comunidades indígenas y rurales quedaron en el olvido, los recursos fueron utilizados para fines ajenos al bienestar del pueblo chiapaneco”, denunció.
Es por ello que Willy Ochoa hizo un llamado firme a las autoridades para que Rutilio Escandón rinda cuentas por los daños causados al estado. “No basta con decir, se cierra este capítulo de la historia, no señor; es necesario que la justicia lo enfrente. Chiapas merece un gobierno comprometido con su gente, que defienda sus intereses y restablezca la esperanza en un futuro mejor”, enfatizó.
Finalmente, Ochoa convocó a los chiapanecos a alzar la voz y exigir un cambio real: “No podemos permitir que quienes destruyeron el tejido social sigan disfrutando de impunidad. Es hora de construir un nuevo capítulo para Chiapas, un capítulo de justicia, paz y desarrollo”.